Este es mi primer post. Normalmente las entradas se escriben para promocionar un servicio o producto. En mi caso he aprovechado esa funcionalidad que tiene el blog de agrupar secciones de texto, para organizar ese viaje de transformación de la web que tienes delante. Te doy la bienvenida oficial a la sección de prácticas que complementan el manual. En el manual trato los aspectos técnicos, te explico cómo se hace. En el blog te daré algunas indicaciones y ejemplos y te propondré una práctica del tema que trato en el manual. Es importante que revises las entradas en el orden en el que aparecen en el blog y no pases a la siguiente hasta haber completado la anterior.
Esta entrada resulta un poco redundante. Corresponde al tema Cómo escribir una entrada. Quiero que escribas tu primer post. Si sí, como lo oyes. Recuerda lo que has leído en el manual, sigue las pautas y realiza las prácticas.
Escribe mucho. 😀
Pautas
Antes de escribir, aunque sea una obviedad, tienes que pararte a pensar sobre qué quieres escribir. Seguro que hay temas que manejas relacionados con tu actividad, la que vas a desarrollar desde tu web. No hay mejor manera de promocionarte y de atraer tráfico que escribir en tu propia web. Esto es lo que hacemos con las entradas.
Tu eres un profesional en tu campo, debes mostrarlo a través de tus entradas.
Las entradas deberán estar bien estructuradas. ¿Qué quiero decir con esto? El tema de que trata la entrada debe estar bien definido. Si te dedicas a las manualidades y tienes en tu tienda una sección dedicada al ganchillo, puedes tener una entrada que se titule «El arte del ganchillo». Ahí le explicarías al lector los beneficios que te aporta a ti el tejer. Es una práctica muy relajante para combatir el estrés, fomenta además la paciencia y es sumamente reconfortante trabajar con las manos. De ahí irías introduciendo al lector en los talleres que realizas para enseñar a tejer y también en los utensilios que vendes para que pueda iniciarse.
No le hablarías de repente del papel maché, porque eso es una técnica completamente diferente, con unos materiales distintos.
De acuerdo, también tienes talleres de papel maché y vendes productos relacionados con el papel maché, pero de eso tratarás en otra entrada para promocionar esos productos.
Es una cuestión de orden. Si puedes tratar sobre distintos temas hazlo en entradas diferentes, que pertenecerán también a categorías diferentes y tendrán etiquetas diferentes.
Ahora viene la pregunta del millón pero ¿Cuántas categorías y cuántas etiquetas tengo que tener? No es una competición. Tienes que tener las que necesites, pero procura que no se te vaya de las manos. Las categorías son perdurables en el tiempo, debes tener de antemano clara la división que vas a realizar por temas. Las etiquetas son un sistema de organización más fugaz, algo que puedes ir añadiendo con el tiempo si lo necesitas.
Prácticas
Reflexiona sobre tu actividad.
Realiza una tormenta de ideas y escribe todas las palabras que te vengan a la mente. Todo vale de momento.
Después agrupa las palabras que estén relacionadas. Esto te dará una idea sobre los temas que puedes tratar en tu blog.
Coge cada uno de los grupos que has conseguido y desarróllalo. Cada grupo de ideas te proporcionará un post.
Cuando tengas esto claro, siéntate delante de la página en blanco de tu primer post.
Ignora de momento las indicaciones de Yoast. Debes centrarte en dar forma a tus ideas y en familiarizarte con el editor. 🙂